En un sueño traslúcido
he atrapado el verde de tus ojos
entre los míos
y silenciado todo lo demás.
Tu mirada fija ofrece vida
y plumaje colorido.
A veces, alegre,
te unes a ellas
y a tu vuelta
suave y saciado
lanzas tus brazos hacía mí
mucho mas hondos y cálidos
que todos mis poemas.
Y yo aquí
ay,
éndote
día samente remos sil
iero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario